Un material…¡muchos juegos!

En nuestras clases utilizamos materiales muy variados para trabajar distintos aspectos musicales con los peques. Desde las estructuras musicales, a la psicomotricidad, pasando por la escucha y el ritmo, nuestros alumnos aprenden de forma divertida utilizando el juego como vehículo de aprendizaje. Hoy queremos compartir con vosotros distintas actividades que hacemos utilizando este material de Flying Tiger…¡unos simpáticos huevos de madera! Originalmente este es un juego pensado para trabajar el equilibrio a través de la destreza manual, pero nosotras le hemos buscado muchos más usos que nos permitan usarlos en nuestras clases de música. Hoy os contamos dos de ellas:

HUEVITOS DORMILONES

Este juego es una variante del conocido  juego de las estatuas. Cada niño tiene su huevo apoyado en su soporte de colores que le hace de cama para dormir. Todos los huevitos empiezan dormidos porque hay silencio alrededor. Cuando la música empieza a sonar se despiertan y empiezan a bailar. Cada uno mueve su huevo al compás de la música y cuando ésta para lo tiene que poner a dormir hasta que se reanude. Podemos poner distintos tipos de música para que los peques investiguen las distintas posibilidades de movimiento que tienen estos objetos.

¿Qué trabajamos con este juego?

  • Psicomotricidad (movimientos de brazos y manipulación de objetos con las manos)
  • Escucha activa (movimiento corporal unido a la escucha)
  • Asociación de música y emoción (distintos movimientos en función a la música que escuchamos)
  • Concentración (reacción ante la presencia o ausencia de música)
  • Creatividad (exploración libre de los distintos movimientos que pueden hacerse con los objetos)

¿A quién va dirigido?

Este juego está pensado para hacer en las clases de Baby Music con los grupos de niños que oscilen entre dos y tres años. También se puede realizar con niños más mayores, animándoles a que encuentren distintos movimientos…¡os sorprenderá la cantidad de cosas que se les ocurren!

LA GRANJA

Colocamos todos los huevos en fila a nuestro lado y mirando hacia los niños. Les decimos que estos cinco huevos viven en nuestra granja, pero son muy aventureros y están deseando irse a la suya. A los huevitos les gusta mucho el sonido de la flauta y este les va a guiar hasta ellos. Con este juego podemos trabajar aspectos muy distintos con el instrumento dependiendo de lo que queramos reforzar con el alumno en ese momento. Es un juego de repetición que nos sirve para consolidar distintas habilidades. Podemos decir que para pasar tienen que escuchar la nota «si» con un sonido sin aire, tocar un trozo de una canción con una coordinación de dedos precisa o incluso una frase de una canción realizada en un único soplido. ¡El objetivo lo marcamos nosotros en función de lo que queramos conseguir!

¿Qué trabajamos con este juego?

  • Concentración (focalizando la atención en el aspecto indicado para conseguir que el huevo pase a su granja)
  • Autoestima (fijando un objetivo que supone un reto abarcable para el alumno, por lo que se siente bien al ver que va consiguiendo que los huevos vayan a su granja y cada vez con más facilidad)
  • Consolidación de habilidades (repetir nos permite que lo que estamos trabajando se fije en el sistema)

¿A quién va dirigido?

Este juego está pensado para hacer en las clases individuales de Flute&Fun con niños a partir de los tres años. Es un juego que ellos mismos nos piden repetir en distintas clases y que puede adaptarse a lo que estamos trabajando.

Y vosotros…¿cómo usaríais este material en clase o en casa?

 

¡Aprendiendo con Humpty Dumpty!

¿Quién es Humpty Dumpty?

 

Humpty Dumpty es el personaje de una de las canciones infantiles más populares de habla inglesa y como habréis podido adivinar por la foto no es nada más y nada menos que…¡un huevo!

Originalmente, esta Nursery Rhyme se trataba de una adivinanza y por eso, en la letra no se menciona en ningún momento que el protagonista sea un huevo. Hoy en día, la respuesta está más que desvelada y podéis encontrar muchas versiones de la canción, así como muchos dibujos de este personaje tan particular.

APRENDEMOS CON Humpty Dumpty

Esta canción, es una de las muchas que hacemos  en nuestras clases de Baby Music y hoy vamos a contaros cómo para que podáis cantarla en casa y pasar un buen rato en familia.

Os dejamos una playlist de Spotify con muchas Nursery Rhymes que hemos seleccionado con mucho cariño y en la que podéis encontrar a nuestro amigo Humpty Dumpty 🙂

  • Letra

Humpty Dumpty sat on the wall,
Humpty Dumpty had a great fall.
All the king’s horses and all the king’s men
Couldn’t put Humpty Dumpty
Together again

  • Coreografía
  1. Al principio las manos están juntas balanceándose hacia los lados, como si Humpty Dumpty estuviera bailando.
  2. Después se cae al suelo y separamos las manos porque se rompe con la caída.
  3. A continuación vienen los caballos y hombres del rey para ayudarle y damos con las manos en el suelo representando el sonido del trote.
  • Coreografía con vasos

Con un vaso

  1. Comenzamos bailando con un vaso de plástico que se balancea hacia los lados con los brazos estirados hacia el cielo.
  2. Luego lo golpeamos contra el suelo imitando el galope de los caballos.

Con dos vasos

Igual que con un vaso, pero chocamos los vasos entre sí para imitar el galope. Este es un poco más difícil que el anterior porque los peques necesitan un mayor control manipulando un vaso con cada mano.

¡Esperamos que os haya gustado esta actividad! Si queréis aprender  con vuestr@ peque muchas más canciones en inglés,  tocar instrumentos de percusión, hacer juegos de dedos y experimentar con la música en directo pasando un buen rato en grupo, os invitamos a probar una clase con nosotras totalmente gratis. ¡Preguntad por los horarios disponibles!

Música en familia…¡aprender es divertido!

Desde que nos embarcamos, hace ya años, en esta aventura que supone transmitir el amor por la música a los más pequeños y ayudarles a que esta sea una herramienta importante en sus vidas, hemos tenido claro que queríamos ofrecer algo especial con nuestro proyecto de música en familia.

¿Qué hacemos en little musical steps?

Nos dedicamos a la enseñanza musical bilingüe en familia, en dos programas según su edad:

  • Baby Music (0-3 años): Papás y mamás vienen a clase con sus bebés para acercarse al mundo musical junto a ellos en un ambiente natural, cercano y divertido. La música ayudará a desarrollar las capacidades de los pequeños y servirá para compartir experiencias positivas que pueden ser extrapoladas al entorno familiar.
  • Flauta travesera Suzuki (desde los 3 años) : Cuando los niños ya tienen tres años podrán continuar desarrollando su potencial mediante el aprendizaje instrumental de la flauta travesera. A través de la metodología Suzuki, los peques aprenderán el instrumento junto a sus padres, de la misma forma que aprenden su lengua materna integrándolo de forma natural en su vida.

¿Cómo lo hacemos?

En nuestras clases, el juego está siempre presente. Jugar es su forma de aprender, de comunicarse, de relacionarse con el mundo que les rodea. Es su mejor aliado para desarrollar la imaginación, la creatividad y para estimular sus sentidos y habilidades sociales. Podríamos decir que el juego es su principal lenguaje y la mejor actividad que podemos compartir con ellos para ayudarles en su desarrollo.

En nuestra metodología es imprescindible la participación del padre, madre o tutor en las clases, convirtiéndose la música en una actividad que forme parte del entorno familiar y se incluya de manera natural en el día a día de los niños.

Todo esto lo desarrollamos en un contexto bilingüe (castellano-inglés), para que los niños se familiaricen con ambos idiomas de forma natural.

¿Dónde lo hacemos?

Estamos en el Centro de Educación Infantil Montessori El Acebuche (Plaza Joan Miró 6. Rivas Vaciamadrid)

Si queréis venir a divertiros y aprender música en familia, podéis contactar con nosotras en info@littlemusicalsteps.com o en los teléfonos 646 091 863/ 650 217 618.

No dudéis en probar una clase sin compromiso y preguntarnos por nuestras promociones. ¡Os esperamos!

Repetir o no repetir, esa es la cuestión

Repetir, repetir y repetir. ¡A los niños les encanta! Pueden escuchar un cuento mil veces y seguirán queriendo escucharlo otras mil veces más. Lo mismo les pasa con los juegos que van aprendiendo y es que para ellos repetir no es aburrido, sino todo lo contrario. Esto es muy importante para el aprendizaje instrumental y hoy queremos hablaros sobre ello.

¿Por qué repetimos?

La metodología Suzuki basa el enseñanza instrumental en el aprendizaje de la lengua materna. Después de haber escuchado una palabra en numerosas ocasiones, los niños empiezan a pronunciarla y cuanto más la repiten, mejor es el resultado. Cuando ya saben decirla correctamente no dejan de utilizarla y esta pasa a formar parte de su vocabulario y la dirán muchas veces a lo largo de su vida.

Con la música ocurre exactamente lo mismo.  Por ello, las piezas de nuestro repertorio no dejamos de repasarlas aunque ya estemos tocando piezas más complicadas. Al igual que tenemos un amplio repertorio de palabras y frases, tendremos un amplio repertorio de notas y piezas musicales que interpretaremos con más maestría cuanto más las repitamos.

¿Cuándo repetimos?

Para practicar, es importante repetir algo desde que conseguimos hacerlo bien y no sólo hasta que nos sale bien. Si repetimos un pasaje difícil de una pieza hasta que nos salga, es posible que lo hayamos hecho diez veces mal y una sola bien. Nuestro cerebro fija los aciertos, pero también los errores. Por eso cuando conseguimos hacerlo satisfactoriamente es cuando debemos repetirlo para poder interiorizarlo. Necesitamos repetir un mayor número de veces aquello que es correcto, para que nuestro cerebro lo seleccione frente a lo incorrecto en el momento en que realicemos esa acción o pensamiento determinados.

Juegos para repetir

Los niños adoran repetir todo aquello que les gusta, por eso es importante plantear la repetición como un juego que querrán hacer una y otra vez. Os dejamos dos ejemplos de repetición que usamos en nuestras clases:

«El dado»

Les encanta y podemos utilizarlo para trabajar muchos aspectos a distintos niveles. Tiramos el dado y este nos podrá indicar el número de veces que tocamos la nota “fa”, la primera parte de la canción “Estrellita” o la escala de Re Mayor, por ejemplo.

«El ábaco»

Para conseguir mover una de las bolitas del ábaco, los niños tienen que tocar correctamente lo que estemos trabajando (un pasaje con buena emisión de sonido, una canción con una buena postura, etc.) Si lo consiguen, esa bolita pasa a estar en su lado. El objetivo es que obtengan una fila de bolitas. ¡Este juego les ayuda mucho a concentrarse en su buena interpretación!

 

¿Puedo tener una flauta de mayores?

img_2561

Cuando un nuevo alumno de Flauta Suzuki empieza sus clases, necesita un instrumento adecuado para su edad y tamaño. Como ya os hemos contado en otro de nuestros post, existen tres tipos de flautas traveseras que se adaptan a nuestras necesidades: pequeños pífanos, flautas junior y flautas de adulto.

Nuestros alumnos más peques empiezan sus andanzas en el mundo instrumental con una pequeña flauta de plástico llamada pífano. ¡Qué ilusión poder empezar a descubrir los primeros sonidos! Esta flauta está pensada específicamente para ellos, no sólo por su tamaño sino también por su escaso peso y por su resistencia a posibles golpes y caídas. Además, al ser de plástico, ¡pueden decorarlas con las pegatinas que consiguen en clase! Con ella dan sus primeros soplidos y aprenden sus primeras notas. Después del pífano, los alumnos pasan a tocar la flauta junior. Esta flauta es de mayor tamaño y grosor, tiene llaves con las que tapar los orificios y la cabeza es curva para facilitar que los niños puedan tocar con una posición de brazos cómoda para evitar tensiones.

¿Cuándo debemos de pasar del pífano a la flauta junior?

Teniendo en cuenta que cada niño es diferente, no nos basaremos en la edad para realizar el cambio. Aunque esta influye, no es el factor determinante.

Su fisionomía y madurez son la clave para poder cambiar de una flauta a otra. Es necesario que puedan sostener bien la nueva flauta más grande y que sus deditos lleguen a las llaves. Por otro lado tienen que estar preparados para entender que la flauta junior hay que cuidarla para que no se estropee. Empezarán a ser los responsables de limpiarla, al principio con la ayuda de un adulto y posteriormente ellos solos.

¿Por qué es importante este cambio?

Los niños han visto las flautas junior de sus compañeros de más edad y saben que pasar a tener una de esas flautas solo puede significar una cosa… ¡ya son mayores! Esto es un punto de motivación muy grande para ellos. Es habitual que los niños nos pregunten a padres y profesores cuándo van a tener una «flauta de mayores» y es ahí donde nosotros les vamos haciendo conscientes poco a poco de la responsabilidad que tendrán con el nuevo instrumento y les vamos preparando para asumirla.

A lo largo de  su aventura musical irán apareciendo nuevos retos para ellos que les ayudarán a crecer y madurar. ¡El cambio de instrumento es sin duda uno de esos retos!

¡Tocamos piezas de mayores!

IMG-20160128-WA0005

Los primeros pasos que dan nuestros pequeños flautistas en el repertorio del método Suzuki son a través de canciones infantiles y populares. Estas piezas  van siendo cada vez más complejas hasta que los alumnos se encuentran con las primeras piezas musicales del repertorio clásico, como son la Nana de Schubert o los Minuetos de Bach.  Les hace especial ilusión llegar a tocar estas obras porque saben que ya no son canciones de niños. ¡Ahora tocan piezas de mayores!

Con estas piezas empezamos a trabajar aspectos y conceptos musicales más avanzados que les serán de gran utilidad en su formación como intérpretes y como músicos en general.  Os dejamos algunas de las actividades que realizamos con ellos y qué pretendemos conseguir con ellas.

  • ¿Qué frase me toca?

La música, al igual que ocurre con los idiomas, está formada por frases que están organizadas dentro de un contexto coherente. Por eso, desde el principio las trabajamos en clase. Hacemos bailes con movimientos asociados a las distintas frases musicales de forma que sin saberlo, nuestros peques están desarrollando la capacidad de distinguirlas de forma natural. Por eso cuando son más mayores saben diferenciarlas con facilidad. Es un lenguaje familiar para ellos y es ahora cuando empiezan a ser conscientes y a deducir por ellos mismos cuando empieza y termina cada una.

En clase nos repartimos las frases musicales. Podemos asignar al alumno la que se repite más a lo largo de la pieza o si está en una fase más avanzada nos las alternamos. De esta manera potenciamos su concentración y asentamos el control sobre el lenguaje de la música.

VIAJANDO POR LAS TONALIDADES

Una novedad de las piezas más avanzadas es que no están siempre en la misma tonalidad. Aunque el Minueto esté en Sol Mayor, puede hacer un pequeño viaje a casa de una tonalidad vecina como Mi menor. Enseñamos a los alumnos a percibir cuando esto ocurre, tanto de oído (cambia el carácter) como a verlo en la partitura (aparecen sostenidos, bemoles o becuadros) y lo trabajamos en las clases colectivas tocando unos las partes en Sol Mayor y otros las partes en Mi menor.

Esto les ayuda en el desarrollo del oído armónico y la interpretación consciente. No tocan notas por tocar, sino que saben que cada pieza realiza un viaje y saben qué lugares van visitando en el camino.

TOCANDO CON EL ACOMPAÑAMIENTO

Al ser un método auditivo que se aprende de forma similar a la lengua materna, la audición habitual es de gran importancia. Para ello, los alumnos disponen de un CD en el que tienen todas las piezas del repertorio  para que lo vayan escuchando en casa de forma regular. De esta manera, los peques escuchan la música que después van a aprender y así las melodías ya forman parte ellos.

Además de este CD, tenemos otro con el acompañamiento de piano para todo el repertorio. Cuando ya se saben la pieza entera, pueden tocar con este acompañamiento en casa y fomentar así la regularidad del pulso, la afinación y sentirse preparados de cara a un concierto.

Cinco razones para aprender música con el método Suzuki

 

Hoy en día nos rodean múltiples metodologías educativas  y a menudo surgen dudas acerca de si serán adecuadas o qué nos ofrecen exactamente.

El método Suzuki surgió para la enseñanza de un instrumento musical, pensado para iniciarse desde una edad temprana y a través del cual se desarrolla al máximo el potencial de cada niño.

Os dejamos las que son, para nosotras, las cinco razones principales para iniciar a los niños en el aprendizaje instrumental a través del Método Suzuki:

1.Se adapta a cada niño

Se trata de una metodología personalizada, que se fundamenta sobre la idea de que el talento no es innato sino que se desarrolla. Debemos potenciar al máximo el talento de cada niño, teniendo en cuenta sus necesidades y respetando su ritmo de aprendizaje.

2. Forma parte del núcleo familiar

 Suzuki considera que somos producto de nuestro entorno, siendo el familiar el más inmediato y el que más influencia ejerce sobre los pequeños. En las clases Suzuki el padre o madre está presente, aprendiendo el instrumento junto al niño para luego poder ser el ayudante durante la práctica en casa.

3. Es un aprendizaje natural basado en la lengua materna

 Suzuki afirma que si todos los niños pueden aprender su lengua madre, también pueden aprender a tocar un instrumento si lo hacen de la misma manera. Esto significa que al igual que aprendemos primero a hablar y después a leer, con el instrumento ocurrirá lo mismo. En un inicio se enseña al niño a tocar a través de la escucha, imitación, repetición y memoria para posteriormente enseñarle a descifrar el lenguaje escrito de la música y que pueda leer partituras.

4. Fomenta el desarrollo social

 Los niños tienen una clase individual y otra colectiva cada semana. Esto implica que desde un inicio los niños comparten la música y el aprendizaje de su instrumento con otros alumnos. Esto es fundamental ya que no sólo es un punto de motivación importante, sino también un espacio en el que los alumnos aprenden a formar parte de un grupo, así como a compartir, respetar y colaborar.

5. Favorece el crecimiento personal

Suzuki habla constantemente de educar a los niños con amor y respeto. Para él la música será una futura herramienta muy valiosa si enseñamos a los niños a amarla y a crecer emocionalmente junto a ella desde un primer momento.

El objetivo de Suzuki no fue sólo enseñar música, sino a través de ella llegar a educar a la persona: “el carácter primero y después la música.” Su sueño fue que, a través de la música, pudiéramos crear un mundo mejor.

Si queréis ver cómo hacemos todo esto, podéis venir a conocernos y probar una clase sin compromiso en El Acebuche de Rivas  (Plaza Joan Miró, 6. Rivas-Vaciamadrid), reservando en info@littlemusicalsteps.com. ¡Os esperamos!

La importancia de los padres en la clase de música

Cuando un padre o madre apunta a su hijo a estimulación musical temprana o Método Suzuki, no sólo está apostando por una actividad que fomenta el desarrollo de las capacidades de su pequeño, sino que además participa activamente convirtiéndose en una pieza clave del aprendizaje.

Las clases son concebidas como un momento para compartir experiencias positivas con los hijos y como una manera de fortalecer el vínculo con ellos gracias a la música. Padres e hijos aprenden de manera conjunta, de una forma natural y divertida que puede ser extrapolada fuera de las clases.

motivos por los que la presencia de papá o mamá en clase es fundamental

  • Los bebés en sus primeros meses de vida necesitan el contacto físico con sus padres para sentir seguridad y calma, sensación que potenciamos con la música. Mientras interiorizan el ritmo musical a través de los movimientos que experimentan en brazos de sus padres, se sienten protegidos. Lo mismo ocurre cuando son un poco más mayores. Saber que papá o mamá están ahí reforzando su aprendizaje les hace sentirse seguros.
  • Las voces de las personas que han acompañado al bebé en su vida y desde incluso, antes de nacer, son las que más van a generar el deseo de imitar, siendo esto fundamental para el desarrollo del habla. ¡Sus familiares son sus cantantes preferidos!
  • Los padres son la principal referencia y el mejor ejemplo para los niños. Cuanto más involucrado está el padre en la actividad, mayor es la estimulación que el niño recibe y antes comenzará a imitar sus movimientos y gestos.
  • La música es un potente transmisor de emociones que los padres comparten con sus hijos, fomentando el vínculo con ellos y  ayudándoles a canalizar sus sentimientos.
  • Después de un tiempo, los padres aprecian la evolución de sus hijos clase a clase y experimentan en primera persona los pasos que van dando.
  • Al estar en clase, los padres toman ideas para poder repetir en casa y de esta manera incluir la música en el día a día de su hijo de forma natural y progresiva.

En algunas ocasiones los niños vienen acompañados a clase de sus tíos, abuelos u otras personas, ya sea porque los papás no han podido asistir o porque quieren participar en la actividad con ellos. Lo más importante es que siempre haya un adulto en clase con el bebé, y ¡qué bien lo hacen las abuelas de nuestros alumnos! No debemos olvidar que las abuelas han entonado canciones de cuna para comunicarse con sus bebés generación tras generación. ¡No perdamos esa bonita tradición!

¿Cuál es el instrumento adecuado para mi hijo?

Esta pregunta ronda la cabeza de muchos padres que van a apuntar a sus hijos a música. Especialmente la de aquellos cuyo hijo no se decanta por un instrumento concreto. «¿Cuál es el mejor instrumento?» La realidad es que no hay instrumentos mejores y peores. Todos los niños pueden aprender a tocar un instrumento, sea el que sea, acompañados de unos padres dispuestos a descubrirle un mundo musical enriquecedor. Es una decisión personal en la que sin duda influye que el instrumento tenga cierto atractivo también para el padre, puesto que en la fase inicial del método Suzuki los padres aprenden a tocarlo junto a sus hijos.

¿y si el instrumento que elijo no es el que hubiera elegido él?

Un padre espera que su hijo tenga clara preferencia por un instrumento y lo cierto es que salvo excepciones contadas y en función del contacto que haya tenido con el mundo musical hasta entonces, esto no tiene por qué ser así. Desde la elección del colegio hasta la comida de cada día, los padres toman decisiones constantemente sobre el futuro de sus hijos y esto ocurre también con su educación musical en la que llega un momento en el que tenemos que decidirnos por un instrumento.

A veces, el niño empieza a mostrar predilección por otro instrumento tras unos años de aprendizaje de un primero. Eso no significa que hayamos perdido el tiempo o que tomáramos una decisión equivocada, ya que lo que se adquiere con un instrumento es válido a la hora de empezar otro. La técnica será diferente, pero el desarrollo del oído, la memoria, la psicomotricidad y en definitiva las estructuras y funcionamiento de la música  ya han echado raíces y el aprendizaje de otro instrumento será mucho más fácil y rápido.

¿En función a que parámetros puedo elegir instrumento?

Lo primero que recomendamos antes de embarcarse en la elección de un instrumento es asistir a clases de iniciación musical si el niño tiene todavía dos o tres años, para que experimenten con la música. Además podemos llevar a nuestros hijos a eventos musicales. Hoy en día hay numerosos espectáculos musicales infantiles que nos presentan diversos instrumentos. Es más fácil que puedan decantarse si los ven en vivo y en directo y escuchan sus diferentes timbres.

Podemos tener también en cuenta dos aspectos de logística que pueden influir en nuestra elección: los horarios de las clases individual y grupal y el precio del instrumento.

Y por último pero no menos importante, hay que pensar también en el profesor. Cuando los niños son tan pequeños, es fundamental encontrar un profesor que sepa hacerles disfrutar y que les transmita pasión por su instrumento. Para eso, lo mejor es probar una clase con esa persona para conocer su forma de enseñar.

Si queréis, podéis leer sobre algunas ventajas y virtudes de la flauta travesera, nuestro instrumento, y además podéis venir a probar una clase gratuita para conocernos.

Por qué tenéis que venir a probar una clase y no os lo podemos contar por teléfono…

Empezamos este blog para compartir con vosotros nuestras opiniones, comentarios personales y referencias a investigaciones o artículos relacionados con la educación musical temprana.

En este primer post queríamos contaros varios motivos por los que venir a probar una de nuestras clases Suzuki y poder comprender mejor nuestra metodología, en este caso la de la enseñanza de la flauta travesera:

1. Porque el Método Suzuki no se parece al sistema educativo de escuelas infantiles o colegios ni tampoco a la enseñanza musical común de conservatorios o escuelas de música. Los papás participan en la clase con sus hijos (sobre todo en la primera etapa, en la que aprenden con ellos a tocar el instrumento) y se crea un vínculo muy especial ligado a la música y su aprendizaje, un hábito que se lleva a casa para la práctica del instrumento.

2. Porque es una educación personalizada, que se adapta a cada niño y a cada familia y en cada momento del aprendizaje o desarrollo del alumno. El método se lleva a cabo a través de una clase individual y otra grupal cada semana, siendo en la primera en la que el triángulo alumno-padre/madre-profesor trabajan en la técnica del instrumento en su momento específico de aprendizaje.

3. Porque es difícil de imaginar si no se conoce, ya que se basa en el aprendizaje a través de juegos, canciones y bailes, siempre con energía y actitud positiva ante el hacer del alumno y sus padres. De esta forma aprender música es divertido, funciona, ¡y no es una carga para el niño!

4. Porque es bueno para el padre o madre ver también en la primera clase cuál es la reacción de su hijo ante este nuevo estímulo. Leemos y reflexionamos sobre métodos educativos o distintas actividades para los niños, pero realmente la última palabra la tienen ellos y su respuesta a la clase y al profesor o profesora son cruciales para saber si lo que hacemos funciona.

5. Porque ofrecemos una clase de prueba gratis , pues sabemos que nuestra metodología es algo diferente a lo que se suele entender por “clases de flauta” y que es necesario un primer contacto donde conocernos y tener las primeras sensaciones. ¡Estáis invitados!